Por mi parte lejos de verlo como una medida terrorista o amedrentadora, es una medida sana. Es positivo que una autoridad indique sus criterios de fiscalizaciones, expongan sus razones, es lo más transparente y lo ideal. En el pasado nomás te daban el zape o el garrotazo, sin avisar.
Quien tenga cola que le pise podría verse incomodado, pero también los contribuyentes aun estando bien tal vez por tanto pajuelazo del pasado, se vean confundidos y que en esta ocasión, sea otra rayita más al tigre.
Al contrario, si se ofrecen las reglas y suponiendo que fueran de lo más mal diseñadas, que no es el caso, pero bueno si fueran inadecuados, pues que bien es el momento de anticipar la jugada, ya sabríamos como defendernos pues la autoridad ha mencionado te voy a dar hasta por la cocina, la cochera, recámara y también el baño de tu casa. Bueno hipotéticamente sería un ladrón gentil, educado y honesto, por anticiparte por dónde llegará y que hará.
Sinceramente está indicado que llegará a tocar la puerta y que revisara la previsión social, si se la fundamentan aun siendo en efectivo, no se aprovechará de su envestidura. Pero siendo cubierta en efectivo ya tiene razón para presuntivamente decir que no es previsión social, que son disfraces. Pero es clara la autoridad, solicita le acrediten aun en pagos en efectivo, el sentido objeto y se documente el fin para la institucionalización de la seguridad social y se darán por servido. Así lo interpreto de mi parte. Pero de no lograrse este propósito, entonces no darán marcha atrás a sus presunciones de integración salarial.
El punto toral de la circular está en sus últimos párrafos, ahí viene como darle la vuelta a las presunciones de equiparación salarial por estas previsiones sociales.