Siempre he sido de la idea de que de las malas experiencias se debe aprender algo nuevo, es decir, tener todo en orden, contratos de trabajo, listas de nomina, tarjetas checadoras, que los trabajadores firmen un reglamento interno de trabajo, etc. Todos aquellos documentos con los cuales el patrón en un determinado momento pueda bien a acreditar un despido justificadamente.
La estrategia puede basarse en alegar faltas de probidad, actos de violencia, etc. del trabajador hacia el Patrón ofreciendo para ello una prueba testimonial en la audiencia de Ley y tal vez la confesional a cargo del trabajador.