Prevén golpe fiscal
Señalan especialistas que podría el Gobierno revivir iniciativa de IVA a alimentos y medicinas
Dayna Meré y Dolores Ortega
Cd. de México (7 abril 2009).- La Secretaría de Hacienda podría aumentar impuestos –como el IVA a alimentos y medicinas– y endurecer el cobro de los gravámenes para el 2010, ante la caída en el precio del petróleo, el término de las coberturas adquiridas y la baja en los ingresos tributarios este año, advirtieron fiscalistas.
Hacienda envió ya al Congreso su primer estimado de Presupuesto para el próximo año, donde propone un gasto neto de 3.18 billones de pesos, cifra superior en 50 mil millones al previsto para el 2009.
La dependencia explica, en el documento enviado al Congreso, que espera 93 mil millones de pesos adicionales por medidas fiscales "que compensan la pérdida de la recaudación como consecuencia de la menor actividad económica", pero no detalla cuáles serán esas medidas.
Para el especialista Óscar Adame, un primer indicativo de esos planes puede ser la aprobación que, en tiempo récord, hicieron los Diputados a la reforma constitucional sobre amparo fiscal.
"El objetivo de esta reforma (la de amparo fiscal)", dijo el fiscalista, "es que ya negociaron en lo oscurito los tres partidos más importantes para tratar de sacar una reforma que obligue a todos los mexicanos a pagar.
"Es la crónica de un robo anunciado, porque el robo lo van a legalizar", afirmó, al criticar cómo con la reforma –que todavía debe ser aprobada en el Senado– se negará la devolución de impuestos pagados, pese a que se gane un amparo.
Otros fiscalistas advirtieron que el Gobierno podría eliminar algunas exenciones consideradas por Hacienda como "gastos fiscales", que se refieren a lo que el Gobierno pudo haber cobrado, pero no lo hizo porque se lo prohíben ciertas leyes.
En el 2008, estos gastos fiscales le representaron al Gobierno 772 mil millones de pesos que no cobró, equivalentes al 7.4 por ciento del Producto Interno Bruto.
Francisco Macías, socio en Impuestos de Deloitte, consideró que los tributos indirectos, como cobrar IVA a alimentos y medicinas, podrían ser aplicados por el Gobierno para compensar el impacto de la desaceleración.
Con ello, la Federación podría allegarse recursos por 135 mil 400 millones de pesos, según lo reportado en el 2008 en el Presupuesto de Gastos Fiscales.
"Creo que esta gente se va a aventar el tiro de la reforma al IVA en alimentos y medicinas", coincidió Adame.
Además, calificó de preocupante que se haya reformado la Constitución a la carrera en cuestión de amparo fiscal, atentando contra derechos de proporcionalidad, equidad y legalidad de los contribuyentes.
Jaime García, presidente del Instituto de Contadores Públicos en Nuevo León, coincidió con Adame en el temor de que la reforma al 107 de la Constitución sobre el amparo fiscal sea el principio de impuestos inconstitucionales.
"Nos preocupa la creación de impuestos inconstitucionales", dijo, "sin el temor de Hacienda de que tenga que devolver y que allane el camino para otras reformas".
A su vez, Francisco Wilson, socio en Impuestos de PricewaterhouseCoopers, citó la reforma al Artículo 5 del Código Fiscal de la Federación que plantea permitir a la autoridad la interpretación de las leyes fiscales a su favor.
Para Carlos Cárdenas, socio en Impuestos de Ernst & Young, es urgente que se eliminen los regímenes preferenciales que no tengan una verdadera justificación económica o social, con el fin de que todos tributen bajo las mismas bases.