Antes que nada felicidades por que el asunto que lo trajo a Mérida llegó a feliz término. Que gusto oír todo lo que dice, que mis paisanos lo hayan tratado bien, y se vaya tan enamorado de mi tierra. Espero que la modernidad no haga desaparacer nuestras costumbres y lo que caracteriza al pueblo yucateco.
Lástima, dos días resulta tan poquito tiempo para conocer y probar el amplio menu de nuestra cocina, sin embargo confio, lo que pudo probar le haya gustado, y no haberle enfermado del estomago, ya que para algunas personas es muy fuerte.
Considero nuestro hermoso traje regional hace lucir a la persona que lo use, dígale a su esposa que se verá super guapa, portando un huipil.
Visítenos las veces que quiera, siempre serán bienvenidos.