No importa la edad, emprender suele provocar emoción y temor. Puedes o no tener experiencia, tenerla no garantiza que no se sienta temor. Un contador que decide iniciar un despacho de contadores, sin importar la edad o camino recorrido, es natural que sienta el temor ante la posibilidad del fracaso. Se puede ser un experto incluso ya en el ejercicio profesional, pero iniciar algo propio, intimida, uno quiere hacerlo bien, ir a la segura, para bien o para mal la experiencia es algo que no se vende en las farmacias, pero si es algo que se puede plasmar en papel. Ponemos a su consideración el resultado de colaboraciones, comentarios, sugerencias e ideas que una gran cantidad de contadores han venido realizando a lo largo de más de 15 años en foros, chats y distintos espacios de la red, todo con un solo fin, compartir su experiencia con cualquiera que desee leerla. ¿La vas a desperdiciar?
Nuestra gratitud eterna para aquellos que han colaborado de una u otra forma en la integración de este material, que resulta de utilidad no solo a los que pretenden iniciar con un despacho, es de utilidad incluso a los que ya llevan un tiempo con su despacho y no han logrado posicionarlo como quisieran. Si encuentras algún comentario tuyo, ¡Gracias!, porque merced a ello nos haces crecer como profesionistas, si consideras que algo falta y sabes que es, por favor envía tus comentarios, ideas o sugerencias al correo que se facilita en el material y cuenta que en la próxima edición que se emita va a quedar plasmado en beneficio de todos.
Por lo detallado y extenso del material, el mismo ha quedado alojado en nuestra sección de descargas, clic aquí para acceder, recuerda que su descarga NO tiene costo alguno, basta con identificarse como usuario de la página, el uso o difusión del material igualmente no tiene costo alguno y se da por autorizado con el simple hecho de citar la fuente de donde se obtiene.
Una vez más ¡Gracias! A todos los que han colaborado para su integración y a los que les pueda resultar de utilidad, ¡Felicidades!, no somos pocos los que luego de leerlo hemos dicho, “me hubiera gustado que alguien me diera este material en mis inicios”.